El temporal de la primera quincena de Noviembre nos trajo, aparte de destrozos varios por toda la geografía (no hay más que ver cómo quedó el Paseo Nuevo de San Sebastián, por ejemplo), la buena noticia de varios nuevos récords de producción eléctrica de origen eólico.La producción eólica alcanzó el 9 de Noviembre los 14.962 MW a las 14:46 horas, un 13,5% más que el anterior récord alcanzado la víspera; como orientación, este nuevo récord de potencia instantánea, cercano a los 15.000 MW, serviría para abastecer la demanda eléctrica de un país como Argentina.
Además, la cifra tiene especial valor ya que se produjo en plena hora punta de la demanda eléctrica y no de madrugada, como ha ocurrido otras veces. La integración de esa gran cantidad de energía renovable -que, junto al resto de fuentes limpias, cubrió en ese momento el 65% de la demanda eléctrica- en la red nacional demuestra la enorme capacidad de adaptación que tiene el sistema eléctrico español.
Ese mismo día 9 de Noviembre se consiguió un nuevo máximo de producción horaria, con 14.752 MWh entre las 14 y 15 horas. También se alcanzó el máximo de energía eólica diaria, llegando a los 315.258 MWh, un 13,2% superior al récord anterior de 278.507 MWh.
Durante el momento de máxima producción eólica, se exportaron 1.498 MW mediante las conexiones con Francia, Portugal y Marruecos y se activó masivamente el consumo de bombeo de agua en las presas con diferencia de pendiente (1.951 MW)
Entre las 3:39 y las 5:41 de la madrugada del 9 de Noviembre, el Centro de Control de Energías Renovables tuvo que emitir órdenes de reducción de generación eólica para garantizar la seguridad del sistema.
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